martes, 21 de agosto de 2007

RABIA o el marido de la mujer doberman


Sigo haciendo el intento de estar consciente todo el tiempo, ver lo que pasa en el mundo desde mi propia experiencia para aprender a reconocer la verdad... Hoy regresaba de mi clase de Taichi, cuando he visto una pelea, un hombre de treinta y algún años, mal llevados, le gritaba a una mujer de cincuenta y tantos porque, al parecer, ella había hecho algún comentario sobre el perro de éste. No sé que es lo que le habría dicho la mujer, pero desde luego él estaba fuera de sí, daba miedo, tenía tanta rabia dentro que se podía percibir mucho antes de llegar al punto de la pelea. La mujer estaba como parada, no sabía que decir, no decía nada, a lo que él se enfurecía más por el hecho de que ella no escapara corriendo, ella estaba creo que paralizada, no creo que comprendiese nada. La cuestión es que él ha empezado a amenazarle con su mujer, como si su mujer fuese un doberman o el primo de Zumosol, y de repente apareció la mujer, debería pesar 150 kilos, agitaba los brazos y gritaba, "¿qué te pasa vieja?!", y el marido empujaba a la mujer para que empujara a la señora, gritándole "¡Tírala!"... Y yo que salía super relajada de taichí, he sentido miedo y rabia, también me he paralizado porque no entendía una actuación tan desproporcionada, la rabia que emitían hacía que les mirase con la misma rabia porque me estaban dando miedo... He intentado ser consciente de lo que pasaba allí, pensando en cómo ese hombre y su esposa, estaban en ese estado colérico, he sentido su frustración, sus pocas habilidades para expresarse, su falta de respeto hacia el mundo y hacia ellos mismos, y he sido poco humilde, no podía sentir que ellos puedan ser una realidad alternativa mía, en parte de mi todo... Entonces, cuando he intentado pensar en el por qué eran así, en lo que les podía haber pasado y en las decisiones equivocadas de sus vidas, es entonces cuando me he compadecido... la cuestión es que aún no sé si el sentimiento ha sido de compasión, con lo cual está bien la cosa, o simplemente me he permitido sentir lástima de ellos, con lo cual estoy pecando de falta de humildad y de creerme superior a esas personas. Al mismo tiempo, he visto claramente que si emites rabia, recibes rabia, porque de hecho es lo que en un principio estaba transmitiéndoles yo antes de pensar en todo esto, y eso que venía de taichí. O sea que si damos compasión y amor, deberíamos recibir lo mismo. ¿Qué hubiese pasado si esta pareja se hubiese cruzado con el Dalai Lama? No sé, mejor ni imaginarlo.

domingo, 19 de agosto de 2007

viernes, 17 de agosto de 2007

nacimientos


En la fase de esta vida que me ha tocado vivir empiezo a llegar a ese momento en el que los amigos empiezan a tener hijos, o se lo plantean. Acabo de hablar con uno que se acaba de estrenar, estuvo en el parto y se le notaba muy emocionado. Me intentaba describir el momento en el que su hijo le buscó con la mirada, le miraba como si dijera "¿Quién es este tío?". Evidentemente, mi amigo es un hombre que se viste por los pies, y estuvo implicado en todo momento en le proceso. Hay que ser valiente para ser padre... y por más que esté demostrado que de un espermatozoide y un óvulo se forma una persona humana, el momento de esa mirada que me cuenta mi amigo no creo que tenga una explicación científica posible... ¡es un milagro!

jueves, 16 de agosto de 2007

Desde el mirador


Desde el mirador que hay en el rompeolas de Alicante miro la playa del Postiguet una tarde de Agosto. Parece cualquier cosa menos una playa, no se ve la arena sino cuerpos semidesnudos que se confunden entre sí recordándome las texturas de las fotografías de Spencer Tunick. Todos actúan como un uno, con sus egos y virtudes, alegrías y frustaciones, se mezclan en el mar que todo une.

El amor es algo que se reconoce si se mira, los actos altruistas se reconocen si estás atento. No hay que confundir al alma ni dejarse confundir. Dentro de esta multitud de gente te puedes fijar por ejemplo en un padre y un par de hijos adolescentes que llegan nadando hacia el rompeolas donde estoy escribiendo y empiezan a buscar, imagino, que cangrejos. Se percibe la complicidad entre los tres, el cariño que se procesan. Dentro del caos de la Playa de Alicante en el mes de agosto se puede percibir el orden y la claridad. La Verdad es aquello donde concentras tu atención. La primera impresión es el caos, pero en el caos hay orden, sólo hay que buscarlo y encontrarlo, hay que tener paciencia. Todo está bien, todo es como debe ser.

El mito de la caverna



La cuestión es que para creer hay que justificarse... y claro, pruebas materiales no existen en las creencias, y puede ser incluso un error buscarlas. La física cuántica puede ser un intento ya que la materia a nivel subatómico no se comporta como la materia a la que estamos acostumbrados, lo poco que he leído me supera, es algo tan abstracto que no consigo comprenderlo. Al parecer se han hecho experimentos con átomos y parece que no se comportan como materia sino como ondas, pero lo curioso es que cuando te dedicas a observar el experimento, se comporta como materia... Como he dicho no soy física y probablemente me esté equivocando en algo, debería citar fuentes y la única que puedo citar es la película "¿Y tú que sabes?", que no es lo más científico del mundo. Cuento esto porque cuando tomas la decisión de volver a creer la gente que te quiere se empieza a preocupar, tú no quieres sacar el tema porque sabes que no lo van a comprender, es una experiencia no un descubrimiento racional, y ellos te preguntan porque te quieren entender, quieren asegurarse de que no estás metido en una secta, y claro, realmente no quieren entenderte, quieren razonar lo irracionable, entonces una piensa que no tienes que ocultarse e intentas utilizar un lenguaje que ellos entiendan, el lenguaje del mundo material. Y ya me ves, intentando explicar que un átomo se comporta más bien como energía que como materia, que un átomo está casi vacío, que los electrones que son casi más grandes que el núcleo aparecen y desaparecen... Y claro, estas cosas me han llegado porque me he interesado pero realmente, también son casi creencias porque los mismos científicos no tienen claro qué es un átomo. Para mi conocer esto, sin profundizar en la cuestión, simplemente como una hipótesis fue como una explicación de lo que es maya (mundo material-mundo de la ilusión), esto cobraba sentido para mí porque era una especie de explicación científica de lo que estaba sintiendo por otro lado como una verdad espiritual. Y claro, la gente quiere pruebas, sobre todo porque se quedan con que lo que te han enseñado en el colegio como una verdad absoluta es algo indiscutible, dos más dos son cuatro y un átomo es la parte más pequeña en la que se puede descomponer la materia. Y cuando dices que puede que no sea así, que has visto por ahí que los físicos cuánticos se dan de bruces con esto que tratan de explicar y no pueden, pues te piden pruebas y claro, es algo que a una le sirve de momento, pero no puedes darlas, y es entonces cuando te sientes tonta por no tener argumentos... Luego te vas y dices, pero es que es mi experiencia, y no me tienen por qué creer, ni siquiera la tengo que demostrar puesto que no quierto convencer a nadie de nada, porque es así, no necesito convencer a nadie con que tengo razón, simplemente creo en esto emocionalmente y me sirve. Dios es una idea, no una realidad material, aunque la materia sea una extensión de la creación de Dios. Puede chocar entonces la idea de que todo lo que nos preocupa, nos hace felices o desgraciados no exista realmente como creemos y entonces esta realidad es incómoda. Mi acercamiento a Dios me hace feliz, tengo mucho que trabajar para realmente entenderlo y entenderme, pero me tranquiliza pensar que estoy en el camino. Ya Platón con su mito de la Caverna nos hablaba de esto, ¿Cómo vas a hablar de la luz a alguien que sólo ve su sombra reflejada en la pared y encima se compadece de tí porque en el mundo de la caverna te has quedado ciego?¿Cómo vas a liberar de las cadenas a quien quiere quedarse encadenado?

jueves, 9 de agosto de 2007

Experimento con el agua y las palabras

Como ya comenté me llamó mucho la atención la experiencia del Sr. Emoto con el agua, el hecho de que sólo con poner unas etiquetas en el agua con palabras positivas o negativas se pueda cambiar las propiedades del agua me parecía algo muy fuerte e irreal, por eso, como Santo Tomas, quise verlo con mis propios ojos y salió. Cuando pasa algo así quieres compartirlo y ya hay dos personas que lo han experimentado y les ocurrió lo mismo que a mí. La foto me la ha enviado Gloria, el vaso de la izquierda contiene agua con arroz, las palabras que colocó encima fueron "Odio, Guerra y Maldad", el de la derecha tenía escrito "Amor, Comprensión y Bondad", ella se fue de vacaciones y olvidó el experimento, cuando regresó se encontró que el vaso de la izquierda estaba cubierto de moho y el de la derecha estaba totalmente blanco. Muchas gracias Gloria por hacerme llegar la foto. Para quien quiera hacer el experimento simplemente hay que hervir arroz o poner arroz cubierto de agua, en dos botes, para los más científicos, que los botes, el arroz, los letreros y las tapas (si se les pone), que sean iguales... No es un experimento científico (no hay doble ciego, y la muestra no es representativa), pero como experiencia dice mucho, si no te sale no te lo creas y si te sale repítelo tantas veces como lo creas necesario. A mí me ha convencido la experiencia. Si queréis ver las moléculas podéis ir a la página de abajo.
http://www.espinoso.org/biblioteca/aguaconsciente.htm

miércoles, 8 de agosto de 2007

...miro a través del objetivo y ahí estás tú...


Escrito el 11 de Febrero de 1998


No quiero inmortalizar este instante. Sé que si presiono este botón todo será un recuerdo, ya no existirá. Te apunto con la cámara para convertirte en recuerdo y no puedo hacerlo, no quiero hacerlo. Intento postergar este momento. Sé que ahora estás pero mañana te habrás ido y sólo te tendré en negativo en papel... Te tendré ¿Acaso se puede poseer a alguien? Si ni siquiera puedo controlarme a mi misma. Lo único que tendré será tu recuerdo convertido en papel. Te desprenderás de tus defectos y te convertirás en becerro de oro. Serás como la uva pasa, más dulce que el fruto fresco. Pero no te quiero convertir en recuerdo, portergo ese momento, pero será así. No puedo parar el tiempo, no soy Dios y Dios tampoco puede. Ahora soy feliz porque sé que miro a través del objetivo y ahí estás tú, todavía estás tú.

Ventanas hacia adentro: ¿Y tú qué sabes?

Ventanas hacia adentro: ¿Y tú qué sabes?

martes, 7 de agosto de 2007

¿Y tú qué sabes?


Al fin he visto la famosa película y lo cierto es que da que pensar. Que la física cuántica sea una manera científica de seguir la pista de Dios me parece muy interesante.
De manera resumida y según lo que creo haber entendido, en primer lugar se habla de lo ilusorio del que creemos mundo real o material, la física cuántica asume que la materia no existe. Si descomponemos la materia en su más pequela partícula (o hasta el rastro de ella), el átomo, éste átomo no es material, y es más los electrones aparecen y desaparecen no sabemos donde. O sea que lo que consideramos materia no está compuesto por materia. Esta explicación validaría en cierto sentido la teoría hinduista o budista dee "maya".

Otro de los puntos destacables es que matemáticamente existe un gran número de probabilidades de que ocurran cosas o de que las percibamos, para ello necesitamos mirar, entonces sólo ocurrirá una de ellas, en la que nosotros pongamos la atención, nosotros decidimos qué es lo que va a pasar.

Se habla también de las conexiones neuronales que hacemos, y que según estemos habituados a hacer un tipo de conexión y no otra, nos hacemos dependientes de un tipo de emociones y conductas relacionadas a esas emociones.

Sobre los pensamientos hablan de la experiencia de Masaru Emoto con sus fotografías de los cristales del agua, es algo que hay que probar (a mí me salió). Da que pensar, si los pensamientos hacen eso con el agua qué no harán con nosotros.

Otra cosa es que todos somos uno. Para mí esto es el sentido de la compasión del budismo, compasión no es sentir lástima por los demás sino ser conscientes que todos estamos conectados. Pensando en esas probabilidades matemáticas, las otras personas no serían más que las otras probabilidades de distintas realidades de uno mismo pero sujeto a otras variables interactuando en las respectivas experiencias. Por tanto deberíamos pensar cuando vemos por ejemplo a alguien que pide dinero en la calle ¿Qué necesitaría yo si estuviera en esa situación?, no es dar caridad sino ir mucho más lejos. Lo cierto es que cuesta imaginar a alguien con el que no tengas una buena relación que sea otra probabilidad alternativa de uno mismo... ahí ves la cantidad de trabajo que tenemos.

Las buenas y las malas acciones según la película no existen, son sólo probabilidades de hacer cosas, unas acciones nos elevan y otras no. Bueno, para mí el hecho de elevarnos o no es resultado de buenas o malas acciones, estoy de acuerdo eso sí, que Dios no nos castiga, sino que somos nosotros quienes no aprendes la lección. Si hay que buscarle un sentido a la experiencia de estar vivo es la búsqueda de la elevación. Estoy de acuerdo de que nos hacemos adictos a un tipo de experiencias (Karma), y que el no superar esa adicción nos mantiene inmóviles en un mismo lugar, hay que intentar superar las pruebas, si no es así ¿qué sentido tiene el repetir una y otra vez experiencias no satisfactorias?

Repite una y otra vez que nosotros somos Dios al poder ser creadores de nuestra propia realidad, esta afirmación me parece muy rotunda. En mi opinión podemos decir que tenemos a Dios dentro de nosotros pero no podemos decir que seamos Dios, Dios nos supera, es demasiado grande como para abarcarlo y entenderlo. Lo que sí que creo es que si seguimos por el camino de la elevación, nos acercará más a él, a entenderlo y a ser más consciente de que está en nosotros.

En la película no hablan de la muerte, quizá n o tenga sentido si hablamos de física cuántica, aunque en ese caso tampoco deberían hablar de Dios. De todas maneras me ha parecido una película interesante aunque en estos temas la verdad es lo que uno internamente siente que es verdad y esta película ha sido una media verdad para mí.