Últimamente vienen pensamientos a mi mente ( ¿a qué otro lugar si no?) sobre lo que consumismo y su impacto ecológico. Veo que ha habido un cambio bastante sustancial en mi manera de ver por ejemplo el reciclaje, antes me suponía un coñazo el separar los residuos para llevarlos a los respectivos contenedores que se situaban justo delante de mi casa. Sin embargo, desde que decidí vivir mi vida de manera más consciente se ha convertido en un hábito, no es nada molesto aunque me haya cambiado de casa y deba de caminar varias calles para poder reciclar, y también he sido más consciente de los deshechos que van al contenedor de basura orgánica, o los que no se pueden reciclar. En este proceso empiezo a preocuparme por el uso, por ejemplo, de compresas y tampones, también del agua que se malgasta que queda contaminada por nuestros detergentes y champús, y claro me he puesto a investigar y he encontrado una página que ofrecen alternativas en nuestra vida, para que el impacto ecológico de nuestras vidas sea el menor posible: vivirverde.blogspot.com.
Hablan por ejemplo de las nueces de lavado, unas nueces de un árbol que crece en India, con un kilo de cáscara de ese tipo de nuez se puede lavar medio año una familia de 3 miembros, si yo vivo sola, pues puede durar un año. Estas cáscaras pueden tener más de un uso, se pueden hervir en agua y ser utilizadas posteriormente como lavavajillas y como champú.
En cuanto al uso de compresas hablan, a parte de las compresas de las abuelas de toda la vida, de las copas menstruales, una especie de copa de silicona que se coloca en la vagina como si fuese un tampón y que recoge la sangre menstrual. Esta copa es reutilizable y si se conserva bien puede durar unos 10 años.
Creo firmemente que otro mundo es posible, y que cambiar los hábitos no es difícil siempre que tengamos la intención de hacerlo. Os recomiendo que os paséis por esa página, yo al menos lo pienso hacer a menudo.
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