Hace ya 9 años que una amiga mía me regaló un diario, era precioso, ilustrado con fotos de la película "los Puentes de Madison", y con frases de la película. Utilicé este diario de manera lúdica, cogiendo cada una de las frases y llevándome por lo que me inspiraban, escribía en él. Quiero compartir algunas de estos escritos con quienes habéis tenido a bien honrarme con vuestra visita. No soy escritora pero a veces me gusta escribir. A continuación copio lo que me inspiró la frase del título el día 30 de Enero de 1998.
"Y volveré a ser niña, y me querré a mí sobre todas las cosas. Y amaré a mi prójimo como si fuera yo. Y Dios no existirá, Dios seremos mi prójimo y yo. Y sabré que el bien para mí será el bien para los demás, porque los demás serán yo. Besaré los párpados cerrados de mi prójimo cuando pida mi ayuda, cuando en verdad me necesite sólo a mí, porque me amará a mí como si yo fuera Dios. Y reviviré la forma de amar más altruista pura y desinteresada, aquella que se disfruta solamente en la niñez. Disfrutaré del prójimo cuando esté a mi lado sin pensar en el adiós de la despedida, lo disfrutaré como si no existiera mañana y lo dejaré libre cuando no esté. Dejaré que vengan las personas a mi vida y no pensaré en poseerlas. Seré feliz, sé que seré feliz porque no podré echar de menos lo que sé que no poseo. Me sorprenderá el canto de un pájaro, como si fuera la primera vez que lo escuchara, sin poseerlo en mi recuerdo, porque seré conscente de que ese trino jamás antes lo habré escuchado. Y así no me aburrirá la rutina porque la rutina no existirá, todo será nuevo. Como que mis piernas se alternen en cada paso. Todo será nuevo, como nuevo será el verde de la primavera y el ocre del otoño. Como nuevo será el sol que nos regalará el nuevo día. Y dejaré que el sol toque mi rostro y le sonreiré. Y bailaré bajo la lluvia y dejaré que me moje. Y entonces sabré que soy una niña, sabré que la inocencia habrá vuelto a mí. Entonces, sólo entonces, estaré preparada para que estés conmigo...
...Acércate a mí, mientras ensalzo las antiguas tradiciones..."
"Y volveré a ser niña, y me querré a mí sobre todas las cosas. Y amaré a mi prójimo como si fuera yo. Y Dios no existirá, Dios seremos mi prójimo y yo. Y sabré que el bien para mí será el bien para los demás, porque los demás serán yo. Besaré los párpados cerrados de mi prójimo cuando pida mi ayuda, cuando en verdad me necesite sólo a mí, porque me amará a mí como si yo fuera Dios. Y reviviré la forma de amar más altruista pura y desinteresada, aquella que se disfruta solamente en la niñez. Disfrutaré del prójimo cuando esté a mi lado sin pensar en el adiós de la despedida, lo disfrutaré como si no existiera mañana y lo dejaré libre cuando no esté. Dejaré que vengan las personas a mi vida y no pensaré en poseerlas. Seré feliz, sé que seré feliz porque no podré echar de menos lo que sé que no poseo. Me sorprenderá el canto de un pájaro, como si fuera la primera vez que lo escuchara, sin poseerlo en mi recuerdo, porque seré conscente de que ese trino jamás antes lo habré escuchado. Y así no me aburrirá la rutina porque la rutina no existirá, todo será nuevo. Como que mis piernas se alternen en cada paso. Todo será nuevo, como nuevo será el verde de la primavera y el ocre del otoño. Como nuevo será el sol que nos regalará el nuevo día. Y dejaré que el sol toque mi rostro y le sonreiré. Y bailaré bajo la lluvia y dejaré que me moje. Y entonces sabré que soy una niña, sabré que la inocencia habrá vuelto a mí. Entonces, sólo entonces, estaré preparada para que estés conmigo...
...Acércate a mí, mientras ensalzo las antiguas tradiciones..."
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